Días de escuela

 

• La conquista más grande fué que la Universidad se llenara de hijos de obreros.

• El creí qué y el pensé qué, son parientes del tonte qué.

   Meditaciones, pensamientos, conclusiones propias en el observar del día a día de la vida misma.

   Nos encontramos en una época de cambios y como siempre reivindicaciones, en una época en la que el persistir y trabajar de algunos ha dado y seguirá dando sus frutos, tenemos una generación preparada, una generación formada académicamente,  que indistintamente de la familia de donde viene, ha tenido los mismos derechos para poder acceder a una carrera universitaria, a una carrera elegida según sus gustos, no qué años atrás uno no la elegía, a uno le imponían y pagaban lo que se pudiera o lo que te dijeran, estudiaban los que tenían dinero, no quienes querían.

Por otro unos cuantos que se descolgaron y se descuelgan que viendo no quieren ver, y sin ver quieren ver a su manera.

Resulta que en la actualidad según yo veo, tenemos más hijos de obreros formados y con carreras universitarias, que hijos de ricos con estudios o formación.

Resulta que en la actualidad aquellos obreros algunos que no todos, siguen doblegados a quienes poco les dieron tan sólo las migajas, las sobras, la discriminación humana, pero se han vuelto de derechas, y los que han entendido lo importante de formarse, de estar preparado para hacer una gestión pública y universal, que se reparta de manera equitativa para todos por igual, es puesta en tela de juicio, los que según algunos deberían ser de derechas son de izquierdas, y los que eran de izquierdas son de derechas, todo esto sin un equilibro en la balanza, que se decanta a un lado u al otro.

Quizá si practicáramos más la lealtad con uno mismo, que por contra nos dejamos siempre llevar por la corriente de moda, otro gallo cantaría.

Tendemos a ser muy críticos, demasiado críticos, pero un criticar por criticar, porque no son críticas constructivas con una idea, con una solución, la cosa es el ocultismo, el verlo todo negro, todo oscuro y todo con demasiado pesimismo.

Nos conformamos con el encabezamiento de la noticia, con la primera palabra colgada y compartida, nos conformamos con lo que otros gestionen con tal de no querer aprender más, ni tener que pensar, ni sacar conclusiones coherentes, pero eso sí que sepa el de arriba, el que mayor responsabilidad le hemos asignado que toda la culpa será suya, que será utilizado como nuestra cabeza de turco, y que le llevaremos como cordero al matadero, y aquí paz y después gloria.

Continuará….